El No-Ser y el Viaje de Descondicionamiento
Durante el Big Bang, la energía de la Fuente se “rompió” en infinitos cristales. Estos cristales son un fragmento de la energía de la Fuente de donde una vez provinieron. Son el núcleo de nuestra fuerza vital y están presentes en todos los seres vivos.
Estos cristales contienen nuestro modelo energético único y son clave para comprender cómo se descarga en nuestro ser la información de los tránsitos planetarios. Llevan información de todas nuestras encarnaciones y también son donde se almacenan nuestras “nuevas” experiencias.
Impresión de la personalidad y el diseño de los cristales
Los seres humanos llevamos dos cristales primarios que reflejan las energías de nuestro cuerpo y mente.
Estos cristales están impresos con una instantánea de nuestro sistema solar y campos estelares en ese preciso momento.
Esta huella perdura a lo largo de nuestras vidas, dando forma a nuestra experiencia, percepción y comprensión del mundo.
- Cristal de diseño: Impreso 88 días antes del nacimiento, el cristal de diseño alberga nuestra energía inconsciente que se manifiesta en nuestras formas, a las que llamamos nuestro vehículo. Es el canal que guía nuestra forma humana hacia el propósito de ser en esta encarnación en particular. Esta energía también refleja nuestras reacciones biológicas y animales. El Cristal de Diseño influye en la forma en que nuestra forma interactúa con el mundo a nivel celular. Todas las formas de vida tienen un Cristal de Diseño. Viene de la Tierra y regresa a la Tierra cuando morimos.
- Cristal de personalidad: Impreso al nacer, el cristal de personalidad contiene la mecánica de cómo funciona nuestra mente consciente. Refleja cómo observamos el mundo a través de nuestra conciencia, a la que llamamos nuestro pasajero. Es la energía que nos ha acompañado a través de las vidas, actuando como el observador de todas las vidas, y es nuestra conexión directa con la Fuente. Los seres (como los humanos) que tienen capacidades de autorreflexión tienen un cristal de personalidad.
El diseño humano decodifica nuestras huellas energéticas
Para comprender nuestras energías únicas como humanos en esta encarnación en particular, el Diseño Humano calcula 26 huellas: 13 de los planetas que imprimen nuestro Cristal de Personalidad y 13 de los planetas que imprimen nuestro Cristal de Diseño. Estas impresiones se muestran en el BodyGraph. Las impresiones de Cristal de Diseño están representadas en rojo y reflejan rasgos inconscientes, mientras que las impresiones de Cristal de Personalidad se muestran en negro y representan nuestra mente consciente.
Estos dos cristales, y sus huellas asociadas, trabajan en conjunto, dando forma a quiénes somos y cómo experimentamos la vida. Están capturados en el BodyGraph y definen nuestra composición energética única, a la que llamamos nuestra definición. Esta es la base de lo que somos, de lo que estamos destinados a ser antes de que se establezca el condicionamiento.
El Aura: Sosteniendo Nuestra Energía en Cuántico
La energía de nuestra Personalidad y Cristales de Diseño se mantiene unida cuánticamente dentro de nuestra aura. El aura, en esencia, es nuestra alma. Es a través de este campo áurico que podemos recibir y transmitir energía.
El aura es un campo toroidal conectado al monopolo magnético, generado desde el Centro G. El monopolo magnético es el eje de rotación del campo toroidal que mantiene nuestro cuerpo y mente en cuántica.
Nuestro ser superior se comunica con nuestro cuerpo y mente a través del aura, guiándonos con percepciones, dirección y sabiduría intuitiva. Seguir nuestra estrategia y autoridad nos ayuda a interpretar esta guía.
El Cristal de la Personalidad
El Cristal de la Personalidad gobierna nuestra conciencia. Es responsable de cómo nos percibimos a nosotros mismos y al mundo que nos rodea. Es la forma en que organizamos la información, los pensamientos y las experiencias en patrones coherentes.
Nuestra mente observa el mundo, y nuestra mente interpreta estas observaciones externas como si fuera ella misma. Debido a que se nos enseña a confiar en nuestra mente para tomar decisiones, y nuestra mente observa nuestra realidad externa, a menudo buscamos orientación externa.
Esta es la raíz de nuestro condicionamiento que experimentamos a partir de las normas sociales, las expectativas familiares y las influencias externas que distorsionan nuestra capacidad de observar con claridad.
Este condicionamiento puede crear una profunda desalineación, lo que hace que tomemos decisiones basadas en el mundo que nos rodea, en lugar de en nuestro auténtico Ser. Esto puede llevar a un desajuste con nuestra verdadera naturaleza y es la base del No-Yo.
El cristal de diseño
El Cristal de Diseño es nuestra forma. Opera a nivel inconsciente y gobierna los ritmos y respuestas naturales del cuerpo, como los latidos del corazón, la digestión y la respiración.
Al igual que un pájaro sabe dónde migrar, o una flor sabe dónde florecer, el Cristal de Diseño es el conducto de guía para nuestras formas. Es el portal de recepción de la profunda sabiduría que proviene de nuestro monopolo magnético.
Las fuerzas condicionantes que influyen en la mente pueden secuestrar fácilmente la sabiduría natural del cuerpo, creando un conflicto entre el cuerpo y la mente.
La mente está condicionada para controlar la sabiduría del cuerpo, lo que puede conducir a experiencias traumáticas y patrones poco saludables repetidos, creando reacciones animales automatizadas en las que es posible que no nos demos cuenta de que estamos participando hasta que sea demasiado tarde.
Con el tiempo, esta desalineación entre el cuerpo y la mente se hace notable ya que el No-Yo está desalineado con nuestro verdadero diseño. Estos conflictos comienzan a dar forma a nuestras vías neuronales y a arraigar el No-Yo en nuestro ser.
La mecánica del no yo
El No-Yo es el resultado de que la mente y el cuerpo estén en desacuerdo. Esto sucede porque la mente está condicionada a creer que “sabe más” que el cuerpo, y al hacerlo, crea resistencia y desalineación.
La mayor parte de nuestro condicionamiento del No-Yo se ve en nuestra apertura.
Nuestra apertura en el Diseño Humano se refiere a los centros, canales y puertas “blancos” indefinidos en el BodyGraph. Estas áreas son los receptores de las energías que nos rodean, las capas energéticas específicas que están sintiendo el mundo que nos rodea.
Tu apertura es donde estás recibiendo la frecuencia de otras personas o tránsitos. Coincide con su frecuencia y lo experimentas como si fueras tú mismo. Por lo tanto, nuestra apertura es donde somos más susceptibles al condicionamiento.
Absorbemos y amplificamos las energías de los demás a través de nuestra apertura, a menudo confundiéndolas con las nuestras. Es por eso que se le llama No-Yo: hábitos, patrones y comportamientos que hemos adquirido y que provienen de fuera de nosotros mismos.
Cuando hay un desajuste, esa capa de tu campo áurico se siente irritada y quiere volver a la homeostasis. Afortunadamente, la guía canalizada de nuestro cuerpo tiene un mecanismo para permitir que la mente sepa cuándo se está desviando.
Esta energía de bandera roja está ligada a nuestro tipo de aura y se llama frustración (generadores), amargura (proyectores), ira (manifestadores) o decepción (reflectores). Este es el sistema de alerta para nuestras mentes cuando no estamos alineados y es hora de volver a nuestro estado natural a través de la autorreflexión.
El propósito del condicionamiento
El No-Yo no es inherentemente malo. De hecho, tiene un propósito: ayudarnos a entender quiénes no somos.
Resalta las áreas de desalineación, ayudándonos a aprender sobre nosotros mismos a través del contraste. Así como no podemos conocer la luz sin conocer la oscuridad, el No-Yo existe para que podamos aprender acerca de nuestro Verdadero Ser.
A través del mecanismo del No-Ser, podemos tener conciencia autorreflejada. Al abrazar el No-Ser, podemos comenzar a comprender y encarnar nuestro Verdadero Ser. Este es el proceso de obtener sabiduría.
Por lo tanto, el condicionamiento juega un papel crucial en nuestro crecimiento y evolución personal. Al experimentar lo que no somos, podemos comprender y apreciar mejor quiénes somos.
El desacondicionamiento es desprenderse de capas de condicionamiento y revela nuestra verdadera naturaleza. Si bien el condicionamiento y el desacondicionamiento pueden ser incómodos, es a través de este proceso que descubrimos y abrazamos completamente nuestro Verdadero Ser.
Cómo funciona el desacondicionamiento
El condicionamiento da forma a las vías neuronales, creando respuestas habituales a los estímulos externos. Este condicionamiento se almacena a nivel celular a través de los Cristales de Personalidad y Diseño.
Las células humanas se someten a un proceso natural de renovación, en el que las células viejas mueren y son reemplazadas por otras nuevas. A lo largo de siete años, esta renovación toca todas las partes del cuerpo. Esto nos da la oportunidad de deshacernos de los patrones de condicionamiento.
Podemos iniciar este proceso alineando nuestras mentes de nuevo a la sabiduría original de nuestra aura, en dos pasos:
- Permita que su mente comprenda las complejidades de su singularidad al obtener una lectura de diseño humano.
- Dale permiso a tu mente para pensar de manera diferente al experimentarcon tu Estrategia y Autoridad Áurica únicas.
Al experimentar con S&A, el cerebro se reconfigura a sí mismo, formando nuevas vías que respaldan la toma de decisiones y reacciones auténticas. Entonces liberamos la huella del condicionamiento, permitiendo que se arraiguen patrones nuevos y más saludables.
El desacondicionamiento puede sentirse como una “desintoxicación energética”, ya que los miedos, inseguridades y comportamientos almacenados arraigados en el condicionamiento salen a la superficie para ser vistos y liberados al tomar las decisiones correctas.
Cada vez que tomas decisiones basadas en tu Autoridad, fortaleces tu alineación, creando efectos dominó que influyen en tus células y centros de energía con el tiempo.
El proceso de desacondicionamiento de siete años
El proceso de desacondicionamiento se desarrolla a lo largo de siete años, durante los cuales nuestro cuerpo y mente experimentan una transformación significativa. Richard Rudd desglosó el proceso de desacondicionamiento de 7 años de acuerdo con las 64 puertas, y es profundo si comienzas a rastrearlo.
Cada año representa una etapa diferente en el viaje, que se resume de la siguiente manera:
- Año 1-2: Conciencia y Resistencia: Comenzamos a reconocer el No-Yo y resistimos los viejos patrones.
- Año 3-4: Desintoxicación y Realineamiento: se libera el viejo condicionamiento y surgen nuevos patrones.
- Año 5-6: Integración y estabilización: Las nuevas formas de ser se vuelven más naturales y estables.
- Año 7: Encarnación: Al séptimo año, estamos completamente alineados con nuestro Verdadero Ser.
Estrategia y Autoridad es una forma sencilla de aprender a tomar decisiones desde un lugar de alineación. Esto nos ayuda a alejarnos de los patrones mentales y volver a la sabiduría natural del cuerpo. Con el tiempo, fortalecemos nuestra conexión con nuestro verdadero yo, lo que nos permite encarnar nuestro diseño único.
La Analogía del Agua Clara: Reconociendo el Verdadero Ser
Nuestro Verdadero Ser es como un vaso de agua clara, pura y transparente. El No-Yo es como la tierra que se arremolina en el agua, nublando su claridad. El agua limpia no ha desaparecido. La suciedad se ha introducido como un agente separado, creando algo nuevo.
Para conocernos verdaderamente a nosotros mismos, concéntrate en el agua clara.
- La suciedad (no-yo): Representa el ruido del condicionamiento, los comportamientos que no son verdaderamente nuestros.
- El Agua Clara (Verdadero Ser): Representa nuestra frecuencia natural, la esencia de lo que somos.
Observar la suciedad nos permite obtener información sobre lo que no nos pertenece. Sin embargo, la clave está en centrarnos en nuestra verdadera esencia. Entonces es más fácil reconocer y liberar la suciedad.
Concéntrese en su agua clara mientras agrega más amabilidad amorosa a su interacción con la tierra. Sentarse en silencio y despejar la mente del ruido externo nos permite experimentar nuestra verdadera frecuencia. Esta práctica nos ayuda a observar el No-Yo más rápidamente cuando estamos atrapados en sus patrones.
Y cada vez que estés atrapado en el patrón del No-Yo, recuérdale suavemente a tu mente que siga experimentando con la Estrategia y la Autoridad. Aquí no hay vergüenza ni culpa.
Por último, hermanos y hermanas, todo lo que es verdadero, todo lo que es honorable, todo lo que es justo, todo lo que es puro, todo lo que es amable, todo lo que es digno de elogio, si hay alguna excelencia, si hay algo digno de alabanza, piensen en estas cosas.